martes, 28 de septiembre de 2010

Donación anónima o con botecito de buen amigo?

Esta noticia llega de EEUU pero es un tema sobre el que las asociaciones LGTB estamos alertando porque puede pasar aquí en un futuro no muy lejano.

Hay una gran diferencia en términos legales realizando la inseminación con semen de donación anómina o conocida ya que en este último caso, al "propietario" del semen siempre se le podrá reconocer como padre en caso de que reclame custodia o paternidad. Además, si estamos casadas, cuando vayamos al registro civil a realizar la filiación de nuestro bebé, nos deberían solicitar el documento de la clínica que acredite que nos hemos quedado embarazadas con semen de donación anónima.

El sorprendido también puede ser el amigo que decide altruistamente darle el botecito a sus amigas, ya que ella podrá solicitarle una pensión aludiendo a su paternidad. Este caso también ocurrió hace un par de años en el Reino Unido.

Conflicto entre una madre lesbiana y su conocido gay que le donó el esperma
Las nuevas realidades familiares generan a veces nuevos conflictos. Es lo que ha sucedido en California, donde una mujer lesbiana recurrió a la donación de esperma de un conocido gay para quedar embarazada. ¿Problema? El padre biológico del niño ha intentado después compartir su custodia.
Karen B. se ha decidido a contar su historia para alertar a otras mujeres que puedan tener en el futuro el mismo problema. “Conozco muchas amigas, tanto lesbianas como heteros, que se están planteando recurrir a un amigo, y no se dan cuentan de los peligros potenciales”, explica.
Karen recurrió a la ayuda de Daniel C., de nacionalidad brasileña, al que conoció a través de una web que pone en contacto a personas interesadas en tener hijos con personas interesadas en donar esperma. Daniel renunciaba a sus derechos de paternidad, al tiempo que quedaba exento de cualquier obligación económica, pero podía conocer y visitar regularmente al niño. Karen prefería esta solución a la de un donante anónimo, debido a una circunstancia personal: una amiga suya es hija de donante anónimo y al parecer se está preguntando continuamente por su progenitor biológico.
Una vez que Karen quedó embarazada, sin embargo, Daniel intentó involucrarse más en su vida y en la de su pareja. De hecho llegó a figurar como padre del niño en el certificado de nacimiento con la autorización de Karen, aunque ésta asegura que en ese momento se encontraba aturdida por los efectos de los analgésicos tras un parto por cesárea y no era consciente de lo que firmaba. Sea como sea, el padre biológico intentó llevarse el niño de visita a Brasil cuando contaba con ocho meses de edad, a lo que la madre se opuso.
Daniel demandó a Karen y exigió compartir la custodia. Finalmente, la justicia de California ha dado la razón a Karen, argumentando que pese a que Daniel figure en el certificado de nacimiento, el papel que había sido acordado cuando donó su esperma no era el de padre, por lo que sólo tiene derecho a las condiciones inicialmente pactadas. Karen, que ha gastado 60.000 dólares en el proceso judicial, está de todas formas preocupada ante la posibilidad de que Daniel secuestre a su hijo aprovechando las visitas a las que sí tiene derecho.

Fuente: Dos manzanas
http://www.dosmanzanas.com/2010/09/conflicto-judicial-entre-una-madre-lesbiana-y-su-conocido-gay-que-le-dono-el-esperma.html

1 comentario:

JC Soriano dijo...

Es un tema muy nuevo y sin duda seguirlo es bueno porque nos enteraremos de muchas situaciones interesantes. Yo es que no tengo del todo claro cual es la ventaja que se se tiene cuando se concibe a un hijo por insiminación artificial en hacerlo con un conocido. La verdad es que me parece más bien una fuente de problemas. Muchas parejas heteros tienen hijos asi y saber que otro es el padre es una fuente de problemas. Por lo tanto ¿que falta hace un padre biológico? aparte de que si en algún caso por cuestión de transplantes pueda ser útil identificar al padre biológico me parece que darle derechos de algún tipo con régimen de visitas y todo lo que eso implica no es nada bueno.